EL AMOR EN LOS NIÑOS

Aunque los romances han sido encajados sólo para la etapa adulta, el amor es un sentimiento que no tiene edad. ¿Existe el amor en los niños pequeños? Francesco Alberoni, autor del libro El primer amor, apunta a que sí. De acuerdo a este profesor de sociología, de la Universidad de Milán, desde los primeros años de vida los niños y las niñas se sienten atraídos por otros y experimentan el estímulo de establecer vínculos amorosos profundos. En otros tiempos estos temas de enamoramiento entre pequeños apenas se tocaba, muchos niños no se atrevían a conversar de estos sentimientos con sus padres. Hoy, por el contrario, los niños maduran más rápido y expresan lo que sienten. Según el estudio realizado por Alberoni, los niños se enamoran por primera vez cuando entran al jardín de infantes, a los tres años, y luego a los seis, cuando empiezan la escuela primaria.

Mi “amiguita” predilecta

En muchas ocasiones son los adultos quienes ponen en la boca de los niños las palabras enamoramiento, novia, amor… Por lo general, esa primer atracción no pasa de ser una amiga especial o preferida. La psicopedagoga Silvia Wolodarsky sostiene que a los dos o tres años, en el jardín de infantes, los chicos ya muestran predilección, de modo explícito, por alguna amiga o amigo. Wolodarsky asegura que a veces las madres alientan y hasta propician un tipo de intercambio que no es acorde con las necesidades ni las capacidades de los niños. A diferencia del adulto, el niño enamorado es tímido. No sabe cómo reaccionar ante la chica de su sueño y no sabe cómo poner en escena los sentimientos que le sirven para seducir.

Un amor serio

Para quienes no toman en serio este sentimiento de los niños es necesario que valoren lo que dice Francesco Alberoni al respecto: “El sentimiento del amor es más auténtico en los niños que en los adultos. Cuando dice ‘me gusta’, el niño revela su verdadera esencia”. Según Alberoni, el amor del niño es conmovedor porque él no sabe fingir, no sabe poner en escena sentimientos que no tiene. “El pequeño no se manipula a sí mismo para manipular a los demás. Es sincero, transparente, sencillo y verídico”. Alberoni coincide con el médico y psicoanalista Donald Winnicott al señalar que los seres humanos, tanto jóvenes como adultos, se enamoran en momentos de cambio, de transformación, cuando están listos para dejar atrás una etapa y comenzar otra. El doctor Christian Plebst, psiquiatra experto en el área infantojuvenil, enfatiza que el amor entre los chicos es más simple y está más cerca de lo que es el verdadero amor, porque lo que ellos sienten es desinteresado.