viernes, 30 de septiembre de 2011

MALTRATO

El maltrato presenciado por niños

jueves, 29 de septiembre de 2011

POR QUE LEER EN VOS ALTA





 
 


¿Por qué leer en voz alta?
La lectura en voz alta conlleva enormes beneficios, tanto para quien lee como para quien escucha. Para los niños leer en voz alta es especialmente significativo porque les anima a explorar los libros y a convertirse en lectores por sí mismos.
Para Rolling Readers USA (1) estos serían algunos de los beneficios que la lectura en voz alta proporciona a los niños.
 
  • Ejercita la imaginación.
  • Aporta conocimientos conceptuales (colores, formas, sonidos, letras, números).
  • Despierta en los niños ideas nuevas y conceptos culturales, permitiendo que se desarrolle su curiosidad y su capacidad crítica, así como sus propios intereses e identidad.
  • Proporciona a los niños información y comprensión del mundo.
  • La lectura en voz alta puede eliminar la falta de concentración, al tiempo que, al escuchar, aumenta la comprensión.
  • Cuando los niños escuchan, se mejora su capacidad de autoexpresión. Al aprender vocabulario nuevo, podrán expresar sus ideas y sentimientos. Dichas habilidades para comunicarse son cruciales para el éxito en la vida.
  • Leer a los niños les anima a leer por sí mismos. La habilidad y el deseo de leer pueden mejor mucho la calidad de la vida de una persona.

¿Qué permite la lectura en voz alta?




  1. Articular el texto con la propia experiencia.
 Un texto evoca en los lectores episodios vividos o conocidos a través de los relatos de otros; de este modo el nuevo texto cobra un significado particular para cada miembro del auditorio. 
  1. Incorporar vivencias y experiencias ajenas.
El intercambio entre el auditorio permite contrastar las propias vivencias con las de otros, enriqueciendo así al propio texto. 
  1. Discutir, contrastar, opinar.
Las situaciones y los personajes del relato dan lugar a distintas interpretaciones que permiten un intercambio enriquecedor. 
  1. Acceder a obras a las que no podrán acceder solos.
Se las ofrece un lector competente. 
  1. Superar el miedo, aumentar su autoconfianza.
Si todos intervienen y opinan sin sentirse sancionados.  
  1. Desechar juicios apresurados, reflexionar.
El debate favorece una actitud reflexiva y una escucha atenta de lo que otros dicen. 
  1. Disfrutar el derecho al placer del texto.

PRACTICAR LA LECTURA EN VOS ALTA




Recomendaciones:

  • El aprendizaje de la lectura en voz alta requiere mediación. Los niños/as deben escuchar cómo leen sus maestros/as, no importa el área que impartan: leer es un acto que atañe a todos. 
  • Es conveniente establecer un momento diario de lectura: el mejor es recién llegados al colegio, después de saludarles y de que cuelguen sus abrigos. Debe establecerse como rutina escolar.
  • El maestro/a deberá leer antes el texto que los alumnos/as leerán después. El profesor/a habrá buscado y preparado el texto previamente, buscando calidad literaria, una temática atractiva y adecuada a la edad lectora de los niños y no buscará adoctrinar ni moralizar a través de la lectura, ni utilizarla para dar lecciones de nada. Se trata de leer, de disfrutar oyendo leer y leyendo. De toda lectura se aprende, sin que haya necesidad de tener una actitud didáctica con los niños/as.
  • Los niños oirán la lectura del maestro/a sin tener el texto delante. Así, los que leen más deprisa no se aburren, y los que leen despacio, no se quedan atrás. Además, es conveniente que construyan mentalmente el significado del texto, que vean lo que están oyendo, que disfruten.
  • Se buscará expresividad sin forzar los recursos expresivos. Buena entonación, pausas realizadas correctamente, utilización de la voz, mantenimiento del ritmo, todo de forma natural y agradable.
  • No se interrumpirá la lectura para explicar el significado de una palabra, se puede entender por el contexto. Si no se ha explicado antes de comenzar a leer, se hará al finalizar. Tampoco se interrumpirá la lectura de los niños para corregirles algún error, esto desconcentra y frustra. Todos nos equivocamos leyendo.
  • Diez minutos de lectura modélica diaria del maestro/a es suficiente.
  • Se recomienda que el 70% de las lecturas sean literarias y el 30% de otros tipos de textos ( informativos, periodísticos, humorísticos, formularios, cartas...)
  • Desvincular la lectura de los deberes escolares, de las tareas diarias. Buscar intimidad, magia, relajación, goce...Así se consiguen más objetivos y más logros.
  • No sobreexplotar los textos. Si utilizamos alguna estrategia de comprensión lectora posterior, no utilizar el mismo texto para otras estrategias. Eso es tedioso y denota economía en el trabajo del profesor. Es preferible tres sesiones semanales amenas y bien preparadas, que querer trabajar el mismo texto toda la semana con distintas estrategias.
  • Procuraremos leer con libros, en vez de hacerlo con fotocopias, (aunque algunas veces lo hagamos, si no tenemos el texto que nos interesa en un libro.)
  • Leer con libertad, sin vincular la lectura a cualquier tipo de contenido, sea didáctico, moral...o procurando inculcar otros aprendizajes. No tener la tentación de mostrar nuestra faceta didáctica que suele impregnar todo lo que tocamos. A veces podemos ser aburridos y coartamos la libertad de expresión y comprensión de los niños, pues intentamos dar nuestro punto de vista como el único válido, y escuchamos poco las opiniones de nuestros alumnos/as. No olvidemos que en la construcción del sentido que implica la lectura, cada cual lleva su propio bagage, sus experiencias, y que cada texto es interpretado y sentido de diferente manera por distintas personas que lo oigan o lo lean.
  • Dar ejemplo como lectores: hablar de nuestras lecturas, llevar encima libros, que se viva un ambiente lector en la escuela.
  • Leer de verdad. Leer mucho y variado. Conocer la literatura infantil. No nos encerremos en los autores consagrados de la Literatura Universal: la mayoría de ellos no escribieron para niños, aunque en muchas ocasiones sea literatura que lean los niños. 
  • Cita de Mempo Giardinelli, de su libro Volver a leer : "Si el docente no está preparado para la lectura, no sabrá transmitir eficazmente ninguna estrategia, por buena que sea, porque él mismo no sabe disfrutar de la lectura y entonces jamás transmitirá el placer de leer a sus alumnos."

miércoles, 28 de septiembre de 2011

LO QUE HACEMOS LAS MAMITAS

Niños
Me pregunto quién no ha utilizado algún truco para hacer comer a un hijo, alguna vez. Me acuerdo que algunos días el dar de comer a mí hija era una verdadera tortura. Teníamos que usar mucha imaginación para que ella se tragara una sola cucharadita de algo. Bailábamos, hacíamos carantoñas delante de ella, y así, muchas veces, era la única forma que teníamos para conseguir que ella se alimentara. Claro está que a los niños no les agradan todos los sabores ni todos los olores, pero no pueden dejar de comer
Eso de tener que introducir los alimentos poco a poco nos ha dado muchos dolores de cabeza. El pescado, el huevo, las frutas, las verduras y la carne ,, madre mía, era de enloquecer. Es lo mismo cuando llevas a tu hijo por primera vez a una guarderi
ía . El periodo de adaptación, es decir, llevarlo un día por una hora, el siguiente por dos horas, y así sucesivamente hasta que él se adapte completamente al local, se hace muy, pero que muy largo. Los padres que hacemos trucos para hacer comer a nuestros hijos sabemos, de sobra, que este no es el mejor método para hacer con que los niños coman. No es la manera más adecuada para educarlos en este sentido. El alimentarse es un hábito que debe ser enseñado a los niños desde que son muy pequeños. ¿Cómo? Pues hablando con ellos sobre lo que están comiendo, lo altos y fuertes que se van a poner, de lo inteligentes que serán, esos detalles que llaman la atención y estimulan mucho a los niños.
Educar a los niños para que coman de todo
Otra forma de educar a los niños sobre la importancia de la alimentación  es explorar un supermercado o un mercado con él. Durante las compras, enséñale la diferencia entre los productos sanos, que se debe comer mucho, y los que no son tan sanos, de los que no se puede abusar. Después de las compras, invítale a que se vaya contigo a la cocina, para preparar la comida. Que él te vea lavar y cortar las verduras, y preparar la comida. Haz con que las mezclas de alimentos y de productos, sea algo divertido para él. Que él se distraiga con las formas de las frutas, verduras, de cómo se pela la manzana, o de cómo lloras pelando una cebolla. Otra forma para convencer a los niños de que los alimentos son importantes, es ofrecerles libros revistas, o contarles cuentos sobre el tema. En el libro Cuentos para comer sin cuentos, hay propuestas realmente atrayentes y divertidas. Es una forma de jugar con los alimentos y evitar las pesadillas en la mesa. La presentación de los platos también es muy importante a la hora de ponerlos delante del niño. Un muñeco en que sus ojos son dos rodajas de zanahoria, en que su nariz es un trozo de patata, y su boca un buen pedazo de tomate, hará con que el niño se sienta atraído por comérselo todo. También es fundamental que elijasrecetas de cocina
con tu hijo. Crear buenos hábitos a la hora de comer es la mejor forma de prevenir laobesidad , problemas como la anemia infantil , u otras enfermedades. A la hora de dar de comer a tu hijo piensa en ello y ya verás qué ánimo te va a entrar

COLESTEROL ALTOEN NIÑOS?




¿Sabia usted que los niños también pueden tener colesterol alto?  Quizá esto le sorprenda pero cada vez se ven más niños con colesterol elevado, sobre todo en aquellos que tienen sobrepeso. 

Es importante saber que los problemas cardiacos se inician desde una temprana edad, luego de algunas décadas la enfermedad se manifiesta con el endurecimiento de las arterias o el taponamiento generando infartos cerebro vasculares.

Las familias pueden mejorar el estado nutricional de los niños eligiendo alimentos de bajo contenido graso y de bajo contenido de grasas trans.

Para ello desde muy pequeños los niños deben consumir alimentos saludables, por ejemplo es importante no consumir margarina, ni tenerla en casa, untar los panes con palta o aceite de oliva por ejemplo.

No comprarles galletas con rellenos ya que están llenas de grasa saturadas y trans justamente las que elevan el colesterol sanguíneo.

Evitar al máximo la comida chatarra, sobre todo el Kentucky y las papas fritas. Buenas opciones son por ejemplo el pollo a la brasa sin piel o a la parrilla con papa al horno y ensalada, anticuchos, o pescados y mariscos en cebiche a la parrilla a la plancha.

Los nuggets fritos no son una buena opción ya que el pan absorbe grasa, aumentando considerablemente su contenido en la comida. Por ello las carnes a la plancha o parrilla con un buen aderezo son indicados e igual de sabrosos. 

Muchos padres y familiares sienten pena por los niños que no consumen golosinas con frecuencia, pero deberá saber que este es un problema de los padres, no de los niños, ya que ellos se sienten contentos consumiendo opciones saludables cuando se les explica el daño que puede ocasionarles los alimentos considerados como chatarra; y el crecimiento y buena salud que obtendrán al consumir alimentos nutritivos y saludables.

Claro que la publicidad de alimentos infantiles no ayuda en esta tarea de inculcar buenos hábitos alimenticios, y es que es muy fácil convencer a un niño con un juguete con figuritas llamativas y un alimento “golosina” LLENO DE AZUCAR Y GRASA DE MALA CALIDAD. 

Por ello como parte de un hábito saludable de alimentación, debemos planificar más horas de juego a los niños y menos televisión que está llena de programas violentos y de propagandas de comida Chatarra.

martes, 27 de septiembre de 2011

NIÑOS INQUIETOS



La hiperactividad es un trastorno de la conducta de los niños, descrito por primera vez en 1902, por Still. Se trata de niños que desarrollan una intensa actividad motora, que se mueven continuamente, sin que toda esta actividad tenga un propósito. Van de un lado para otro, pudiendo comenzar alguna tarea, pero que abandonan rápidamente para comenzar otra, que a su vez, vuelven a dejar inacabada. Esta hiperactividad aumenta cuando están en presencia de otras personas, especialmente con las que no mantienen relaciones frecuentes. Por el contrario, disminuye la actividad cuando están solos.


Perfil de un niño hiperactivo
Según Still, estos niños son especialmente problemáticos, poseen un espíritu destructivo, son insensibles a los castigos, inquietos y nerviosos. También son niños difíciles de educar, ya que pocas veces pueden mantener durante mucho tiempo la atención puesta en algo, con lo que suelen tener problemas de rendimiento escolar a pesar de tener un cociente intelectual normal. Son muy impulsivos y desobedientes, no suelen hacer lo que sus padres o maestros les indican, o incluso hacen lo contrario de lo que se les dice. Son muy tercos y obstinados, a la vez que tienen un umbral muy bajo de tolerancia a las frustraciones, con lo que insisten mucho hasta lograr lo que desean. Esto unido a sus estados de ánimos bruscos e intensos y a su temperamento impulsivo y fácilmente excitable, hace que creen frecuentes tensiones en casa o en el colegio. En general, son niños incapaces de estarse quietos en los momentos que es necesario que lo estén. Un niño, que se mueva mucho a la hora del recreo y en momentos de juego, es normal. A estos niños, lo que les ocurre es que no se están quietos en clase o en otras tareas concretas.



Los indicadores de hiperactividad según la edad del niño
- De 0 a 2 años. Descargas clónicas durante el sueño, problemas en el ritmo del sueño y durante la comida, períodos cortos de sueño y despertar sobresaltado, resistencia a los cuidados habituales, reactividad elevada a los estímulos auditivos e irritabilidad.
- De 2 a 3 años. Inmadurez en el lenguaje expresivo, actividad motora excesiva, escasa conciencia de peligro y propensión a sufrir numerosos accidentes.
- De 4 a 5 años. Problemas de adaptación social, desobediencia y dificultades en el seguimiento de normas.
- A partir de 6 años. Impulsividad, déficit de atención, fracaso escolar, comportamientos antisociales y problemas de adaptación social.


Causas de la hiperactividad infantil
La hiperactividad infantil es bastante frecuente. Se calcula que afecta aproximadamente a un 3 por ciento de los niños menores de siete años y es más común en niños que en niñas (se da en 4 niños por cada niña). En el año 1914, el doctor Tredgold argumentó que las causas se deben a una disfunción cerebral mínima, una encefalitis letárgica en la cual queda afectada el área del comportamiento, de ahí la consecuente hipercinesia compensatoria; explosividad en la actividad voluntaria, impulsividad orgánica e incapacidad de estarse quietos. Posteriormente, en 1937, C. Bradley descubre los efectos terapéuticos de las anfetaminas en los niños hiperactivos. Basándose en la teoría anterior, les administraba medicaciones estimulantes del cerebro (como la benzedrina), observándose una notable mejoría de los síntomas.




Síntomas en un niño hiperactivo
Los síntomas pueden ser clasificados según el déficit de atención, hiperactividad e impulsividad:
- Dificultad para resistir a la distracción.
- Dificultad para mantener la atención en una tarea larga.
- Dificultad para atender selectivamente.
- Dificultad para explorar estímulos complejos de una manera ordenada.
- Actividad motora excesiva o inapropiada.
- Dificultad para acabar tareas ya empezadas.
- Dificultad para mantenerse sentados y/o quietos en una silla.
- Presencia de conductas disruptivas (con carácter destructivo).
- Incapacidad para inhibir conductas: dicen siempre lo que piensan, no se reprimen.
- Incapacidad para aplazar las cosas gratificantes: no pueden dejar de hacer las cosas que les gusta en primer lugar y aplazan todo lo que pueden los deberes y obligaciones. Siempre acaban haciendo primero aquello que quieren.
- Impulsividad cognitiva: precipitación, incluso a nivel de pensamiento. En los juegos es fácil ganarles por este motivo, pues no piensan las cosas dos veces antes de actuar, no prevén, e incluso contestan a las preguntas antes de que se formulen.


Consecuencias en la familia con un niño hiperactivo
Los padres suelen definir a un hijo hiperactivo como inmaduro, maleducado y gamberro. Sus comportamientos generan conflictos en la familia, desaprobación y rechazo. Son irritantes y frustrantes en cuanto al éxito educativo de los padres, y algunos niños tienden al aislamiento social. Este trastorno ya se detecta antes de los 7 años y unos tienen síntomas más graves que otros. Una cosa que hay que tener en cuenta, es que si los padres riñen exageradamente al niño hiperactivo, pueden estar fomentando un déficit de autoestima por su parte (sobretodo si lo critican por todo lo que hace) y realimentan el trastorno, ya que el pequeño acabará por no esforzarse por portarse bien, pues verá que siempre acaban regañándole haga lo que haga.




Tratamiento de la hiperactividad
El tratamiento depende de cada caso individual.
El tratamiento farmacológico más utilizado son los estimulantes, que sirven para ayudar a que el niño pueda concentrarse mejor, y los sedantes en el caso de que el niño muestre rasgos psicóticos.
El tratamiento psicoterapéutico está destinado a mejorar el ambiente familiar y escolar, favoreciendo una mejor integración del niño a la vez, que se le aplican técnicas de modificación de conducta.
El tratamiento cognitivo se basa en el planteamiento de la realización de tareas, donde el niño aprende a planificar sus actos y mejora su lenguaje interno. A partir de los 7 años, el lenguaje interno asume un papel de autorregulación, que estos niños no tienen tan desarrollado. Para la realización de cualquier tarea se le enseña a valorar primero todas las posibilidades de la misma, a concentrarse y a comprobar los resultados parciales y globales una vez finalizada.

CARIES DEL BIBERON

Si tienes hijos, seguramente habrás oído hablar de la llamada “caries del biberón”.  Así se le conoce a la caries que afecta a los bebés y a los  niños pequeños. Este tipo de caries se presenta por lo general en los dientes delanteros de arriba, pero también puede afectar a otros dientes. ¿Quieres saber de qué se trata este tipo de caries? Aquí te contamos para que sepas y puedas evitar que afecte a tu bebé.
¿Te preocupa alimentar a tu bebé con biberón porque temes que se le dañen los dientes? Si es así, es una preocupación muy válida. La caries dental (picaduras en los dientes), una de las enfermedades más comunes que afecta la salud oral, puede atacar la boca de tus pequeños hijos cuando lo alimentas con biberón. “La caries del biberón” ocurre cuando los líquidos azucarados o los que contienen azúcar de forma natural como la leche de vaca, leche de fórmula o jugos de frutas, se quedan en los dientes de tu bebé por períodos largos. Así se crea el ambiente perfecto para que las bacterias crezcan y produzcan los ácidos que atacan los dientes causando las molestas caries.
Si piensas que porque amamantas a tu bebé se salva del riesgo de desarrollar la caries del biberón, esto es un error. Si le das leche materna a tu bebito por períodos de 15 minutos o más, la leche materna también puede causarle caries. Algunas madres usan el truco de sumergir el chupete en azúcar y esto también es perjudicial. Debes evitar también darle bebidas azucaradas antes de su siesta o de que se vaya a dormir por la noche, puesto que cuando dormimos, el flujo de saliva disminuye y las bacterias hacen de las suyas.
“La caries del biberón” generalmente afecta a los dientes frontales superiores, pero puede afectar a muchos más. Muchas veces puedes pensar que porque los dientes de leche son temporales, no son importantes. Pero todos son importantes, Si tu bebé tiene caries del biberón, puede que desarrolle hábitos de alimentación poco saludables, que tenga problemas para hablar y dientes torcidos y dañados cuando sea adulto. Esto significa que la caries del biberón afectan tanto la salud de los dientes de leche, como de los permanentes.
¿Qué puedes hacer entonces para prevenir la caries del biberón? Afortunadamente existen formas de llevar una higiene oral incluso a una edad muy temprana. Sigue estos consejos:
  • Cada vez que alimentes a tu bebé, límpiale las encías con agua y un trapo limpio o un cepillo.
  • Cuando le salgan los primeros dientes, cepíllaselos sin crema dental.
  • Limpia y masajea las áreas donde aún no hay dientes.
  • Usa la seda dental cuando ya le hayan salido todos los dientes.
  • Llévalo regularmente al dentista a partir d que cumpla un año de edad.
  • Dale a beber agua de la llave (en Estados Unidos) después de tomar bebidas azucaradas. El agua de la llave en este país contiene flúor, una sustancia que le ayuda a prevenir las caries. Si tienes dudas acerca de esto, consulta con el odontólogo o dentista. En otros países el agua de la llave puede no contener flúor ni ser potable, infórmate.
También puedes seguir otras pautas para evitar la caries del biberón como las siguientes:
  • No dejes que tu bebé se duerma tomando biberón con algo que no sea agua.
  • No le llenes el biberón con bebidas azucaradas.
  • No sumerjas su chupete en nada dulce.
  • Disminuye el consumo de azúcar de tu bebito, especialmente entre comidas.
No te olvides que una buena salud oral empieza desde la temprana infancia. Esto determinará que tu hijo o hija sea un adulto con dientes fuertes y sanos.

lunes, 26 de septiembre de 2011

LA VISITA OPORTUNA AL UROLOGO


Urologo
Si la visita al médico es para muchos hombres un asunto embarazoso, acudir al urólogo es algo considerado como una aventura para los más valientes, pues por tratarse del área genital, no cualquiera está dispuesto a la inspección de un especialista. Si ese miedo se guardara por un momento, muchos problemas de salud se atenderían a tiempo y con oportunidad de ser curados.
El Urólogo, es el especialista que trata los padecimientos de los hombres con mucha distancia, quienes por su condición machista, inconscientemente dejan pasar tiempo valioso antes de recibir atención del médico y resolver problemas que pueden tener consecuencias graves.
Por fortuna, hoy en día la juventud tiene más conciencia de atenderse oportunamente y acude a recibir ayuda cuando es más fácil emprender acciones que puedan controlar o erradicar problemas tales como cáncer, infecciones en las vías urinarias, problemas de pareja por disfunción eréctil, cálculos en las vías urinarias, enfermedades infectocontagiosas, incontinencia urinaria, entre otras.
En la actualidad, los padecimientos de disfunción eréctil, tumores de testículos y las infecciones en las vías urinarias son destacados en la población joven entre los 20 y 30 años de edad, a diferencia de otros tiempos, en que el mal era detectado cuando había muy poco que hacer para remediarlo. Es por ello que es fundamental saber cuáles son los procedimientos más recurrentes que atiende el urólogo, primer paso para hacer conciencia y acudir a una revisión que puede evitar muchos sinsabores.

PRÓSTATA.

Estadísticas al respecto señalan que el cáncer de próstata es el segundo en frecuencia entre hombres mayores de 40 años. Cerca de edad pueden presentarse problemas al momento de orinar (dificultad y dolor para hacerlo), sensación de que se ha concluido y el deseo impetuoso de ir al baño nuevamente después de unos minutos, así como la falta de control de los esfínteres para contener dichos requerimientos.
Es recomendable que los hombres se practiquen examen de próstata a partir de los 40 años, y a partir de edad anualmente, pues cuando se establece un diagnóstico oportuno, el tratamiento para alguna infección es efectivo hasta en el 90% de los casos. La revisión que realiza el urólogo se basa en examen rectal, en el que se palpa el tamaño de la próstata introduciendo un dedo por el ano, con el que se puede verificar si existen estructuras anormales o inflamación.
INFECCIONES URINARIAS.
Síntomas como urgencia para orinar y hacerlo con frecuencia, así como dolor y ardor al hacerlo, son frecuentes en quienes sufren infecciones en las vías urinarias. Su origen se ubica en las bacterias que llegan al sistema, siendo la más frecuente la Escherichia Coli, habitante normal del intestino.
El problema aumenta cuando la bacteria se dirige a través de dichas vías a los riñones, que también se pueden infectar. Así que, además de los síntomas mencionados, se deben tomar en cuenta el color de la orina, que puede tener un tinte turbio por la presencia de pues o ser más oscura por la presencia de sangre.
Otros factores que influyen para que haya una infección, son los cálculos renales, la retención de orina, las anormalidades anatómicas del tracto urinario, así como enfermedades de transmisión sexual (gonorrea, sífilis y otras). El diagnóstico se realiza mediante historia clínica completa y examen de orina.
DEL ÓRGANO REPRODUCTOR.
Los padecimientos que aluden al pene son también responsabilidad del urólogo, siendo los más importantes:
La Disfunción Eréctil: llamada antiguamente impotencia, este padecimiento se caracteriza por la incapacidad recurrente para tener una erección lo suficientemente rígida que permita establecer una relación sexual plena (es común que no se pueda realizar la penetración. Este funcionamiento anormal del órgano viril puede tener origen anatómico.
Es frecuente que se asocie a enfermedades como diabetes e hipertensión arterial, problemas de circulación y del corazón, así como anomalías congénitas en los vasos sanguíneos del pene, o como respuesta al aumento de los niveles de colesterol (principalmente en personas obesas).
Cuando las enfermedades son descartadas, se remite al paciente a tratamiento psicológico, pues el padecimiento puede deberse a trastornos neurológicos, consumo excesivo de tabaco, alcohol o drogas.
En un porcentaje alto de casos, el urólogo prescribe testosterona, (hormona responsable de la producción de espermatozoides, rasgos viriles y potencia eréctil), debido a la baja presencia de esta en el organismo del paciente, así como medicamentos que promueven la sangre que se dirige hacia el pene para que se mantenga en esta zona, el tiempo suficiente para culminar el acto sexual.
La Eyaculación Precoz: Ocho de cada diez hombres en todo el mundo sufren de este problemas, que se entiende como la falta de control del hombre sobre su estado de excitación sexual, que acelera involuntariamente el momento de la cumbre, es decir, la eyaculación.
Las causas principales de esta anomalía se asocian con nerviosismo o ansiedad, presentes desde los primeros momentos en que el hombre manifiesta su sexualidad. No obstante, los especialistas han localizado causas físicas u orgánicas, siendo la más importante la que se ubica en el mismo pene, pues la cabeza o glande se torna excesivamente sensible al contacto por causa de la excitación sexual.
En la gran mayoría de casos, la terapia psicológica y el aprendizaje de técnicas de control resuelven el problema del paciente.
La Infertilidad: Cuando el origen de la imposibilidad de procrear se encuentra en los órganos sexuales masculinos y femeninos, es función de urólogo encontrar la causa.
Si hablamos de los hombres, puede decirse que entre el 70 y 90% de los casos tienen que ver con reducida capacidad de producción de espermatozoides, lo que puede originarse por alguna anomalía en los testículos debido a la presencia de pequeñas várices (afección conocida como varicocele). Este problema se localiza casi siempre en el testículo izquierdo, y puede remediarse mediante cirugía correctiva que logra recuperar la fertilidad en un 80% de los casos.
Otra causa, es que uno de los testículos (o ambos) no hayan crecido de manera normal, o cuando uno de ellos no se deposita en el escroto (bolsa de piel que los acoge), padecimiento reconocido como criptorquidia. Si esta alteración no se corrige por sí sola antes de 3 años de vida, requerirá una sencilla cirugía.
Cáncer: Después del cáncer de próstata, el que más afecta a los hombres es que se relaciona con los testículos. La forma natural de éstos es ovoidal y son lisos al tacto, de manera que si usted observa alteraciones como crecimiento anormal o aumento de peso en uno de ellos, así como la presencia de pequeñas protuberancias del tamaño de una semilla de consistencia dura, acuda cuanto antes al urólogo.
Por lo regular, el cáncer afecta a sólo uno de los testículos y es altamente curables (cuando se diagnostica a tiempo) mediante cirugía, radioterapia o quimioterapia. Sin embargo, cuando este mal a cobrado cierto avance, se manifiesta mediante la acumulación de líquidos anormales o de sangre en la bolsa de piel que cubre los testículos. Es importante saber que en ninguno de los casos mencionados se presenta dolor, por que el cáncer puede ser detectado tardíamente

LOS PRIMEROS PASOS

No existe una edad determinada para que el bebé empiece a caminar. Algunos bebés empiezan a caminar a los nueve meses, y otros a los 12 o 13 meses de edad sin duda, este es el espacio de vida que mas  anhelan los  padres por que es donde demuestra que  empieza a valer por si mismo, y su motricidad va en perfecto estado. aunque también se debe seguir una serie de consejos para que no ocurra los menores riesgos posibles al andar y tu le puedas ayudar con ciertos estímulos .
En torno a los siete o nueve meses, el bebé debería comenzar a gatear, o sea a desplazarse por cualquier superficie. con las rodillas y manos. Inmediatamente ya se crea más confianza en él, y cualquier mueble o persona que tenga cerca le permitirá cogerse de él y ponerse de pie. Aquí es donde parte tu estimulación, para que lo practique de forma divertida; coloca a su alrededor objetos en distintas posiciones con diversos colores y formas, trata de que el lugar sea lo bastante espacioso, y lo sigues, de haber otras cosas que le puedan causar daño, pero trata en lo mayor posible, no limitarlo, puedes condicionarlo a sentir miedo.
Ya a partir de los 12 meses, se sostiene mejor, está más fuerte y por supuesto estable en su movimiento, maneja con cierta dificultad su motricidad, y la curiosidad le hace, subir en sillas, a la cama, a las piernas de la gente cercana, y conseguirá la estabilidad, caminando con los brazos hacia arriba, porque esto le permite estar más erguido en su caminar y no balancearse.
El cuidado es fundamental, aunque no podrás evitar más de una caída y un chichón. Hay muchos juguetes en el mercado, que desde luego van sujetos a su edad, andaderas o carros que el mismo pueda rodar y manejar, trata de tener a su alrededor su cojines, y protegida las puntas de los muebles y mesa.
La estimulación temprana es el conjunto de medios, técnicas, y actividades  con base que aplicada en forma sistemática y secuencial que se emplea en niños desde su nacimiento hasta los 6 años con el objetivó de desarrollar sus capacidades cognitivas físicas esto ayuda a evitar estados no deseados, con ayuda de los padres esto puede ser de gran ayuda.
Como prevenir los accidentes:
-adaptar la casa durante sus primeros meces.
-procurar que sus juguetes se han  adecuados para  su edad.
-préstale la atención adecuada para prevenir accidentes.
La estimulación:
-enséñale con juegos didácticos para ayudarlos en su crecimiento.
-masajes que les permita la  estimulación que ayudan en sus movimientos

domingo, 25 de septiembre de 2011

EL DOLOR EN LOS NIÑOS

 Desde que nacen los niños están expuestos al dolor, algunos incluso a enfermedades crónicas o procedimientos repetidos necesarios para diagnosticar o para curar enfermedades diversas, procedimientos o técnicas que en sí mismas son dolorosas.
En las primeras horas o días de vida los recién nacidos sufren pinchazos en el talón, en los músculos o en las venas para realizar análisis o descartar enfermedades metabólicas y otras. En las primeras cuatro semanas de la vida algunos son incluso circuncidados y a las niñas se les perfora el pulpejo de la oreja, sin anestesia ni sedación. Todos los lactantes reciben múltiples inyecciones intramusculares, a veces varias simultáneamente, a lo largo de los primeros meses de la vida, única forma de administrar las vacunas, imprescindibles para evitar enfermedades. Todos estos procedimientos causan dolor porque las vías nerviosas que perciben, transmiten y sienten dolor en el cerebro están ya maduras desde antes de nacer. Por eso los niños, incluso los más pequeños, lloran intensamente cuando los adultos les proporcionan dolor, aunque estos generalmente consideran que es poco llanto, poco dolor o que pronto olvidan esta experiencia.
Existen métodos sencillos para anular o disminuir este sufrimiento, métodos poco conocidos por la población que este blog pretende divulgar. Se sabe con certeza, por experimentación animal y con recién nacidos y lactantes pequeños, que cuando el procedimiento doloroso se realiza mientras los niños toman alimentos, el pecho o biberón, el dolor disminuye intensamente porque durante la succión del alimento se liberan endorfinas, unas sustancias naturales almacenadas en el organismo, con alto poder analgésico. Además, durante cualquier situación de dolor, la percepción es menor si el pequeño está acurrucado, acariciado, arrullado por su madre o padre. Por otra parte, es posible aplicar en los puntos de piel donde se producirá dolor: oreja, pene, pierna o brazo para la vacuna, una crema anestésica que evita el dolor.
Más tarde, cuando los niños tienen autonomía para correr o jugar, pueden sufrir pequeños accidentes o fracturas óseas que precisan de puntos de sutura, reducción de las fracturas o simplemente la cura de la herida. Esto, que es doloroso, se practica con demasiada frecuencia sin analgesia y lo que es peor sin que los padres estén presentes, impidiéndose así el efecto sedante y analgésico que produce la palabra, el arrullo y la protección de los padres.
Pocos niños se libran de algún análisis de sangre, algunos son portadores de enfermedades recidivantes o crónicas que precisan controles analíticos o tratamientos molestos. En estos es tan importante el miedo al dolor como el dolor mismo. Para ellos y para los que sufren dolor más intenso existen múltiples fármacos analgésicos y sedantes potentes y seguros, que no solo suprimen el dolor, también producen amnesia retrógrada por lo que la próxima sesión no recordarán la anterior. El dolor no tiene ninguna utilidad, no solo no cura sino que muchas veces dificulta la curación y la rehabilitación. Aunque los médicos a veces no podemos curar, siempre debemos aliviar.
Ya es hora de que los médicos en general, los pediatras en particular y los hospitales de niños apliquen el principio de que el dolor no cura y por ello debe ser siempre evitado y no solo por motivos humanitarios, también porque dificulta muchas veces el proceso de curación.

sábado, 24 de septiembre de 2011

CUANDO LOS PEQUES TARTAMUDEAN


El fenómeno sorprende a muchos padres. Un chico que se había largado a hablar y que, incluso, lo hacía ya. que quizá asombraba y hasta enorgullecía a la familia por lo elaborado y lo fluido de su lenguaje, empieza. de repente, a tartamudear.

Es relativamente frecuente que en torno de los 3 años, poco después de que un chico haya empezado a hablar con soltura, se de una fase pasajera de tartamudeo. Puede ocurrir como consecuencia de alguna crisis nacimiento de un hermanito, inicio del Jardín…) o bien porque sí, sin causa aparente que lo explique.

El desarrollo del lenguaje no siempre sigue una evolución linealmente progresiva, sino que, a veces, se producen pequeños retrocesos, como una especie de respiro antes de seguir progresando. En algunas ocasiones, se da una continuidad entre las estructuras ya dominadas con soltura y otras más complejas que tienen que adquirirse, exigiendo una reestructuración que puede traducirse en un período de aparente torpeza.

Nuestra actitud es muy importante. Si se actúa adecuadamente, esta fase será pasajera en un 80 por ciento de los casos, mientras que si se cometen ciertos errores, aumenta la posibilidad de que la tartamudez se instale y se perpetúe. Ayuda mucho hablarle despacio y tranquilamente, y reforzar la confianza en sí mismo mostrándole amor y elogiando sus aspectos positivos.

Si, pese a todo, los tropiezos son muy marcados y se prolongan durante varios meses, habrá que hacerle un examen especializado, por si se está instaurando un auténtico trastorno que requiera tratamiento.

Aspectos importantes a tener en cuenta:
  • Escuchar al chico relajadamente.
  • No apremiarlo.
  • No dar señales de impaciencia (cuidado con los gestos y con el lenguaje corporal).
  • No hacerlo repetir.
  • No obligarlo a hablar más despacio.
  • No terminar sus palabras por él.
  • No corregirlo ni hacer ninguna observación al respecto.
  • Esperar pacientemente a que termine de decir lo que quiera.
  • Atender al contenido de lo que dice, no cómo lo dice, y responder exclusivamente en función del contenido.

ESTRABISMO EN LOS NIÑOS

Estrabismo significa literalmente «mirar torcido». Decimos que un niño tiene este problema cuando uno o los dos ojos se desvían de los ejes oculares, es decir, cuando la mirada no está alineada.
En qué consiste: Normalmente, uno de los ojos se desvía hacia adentro o hacia afuera, pero también puede hacerlo hacia arriba o hacia abajo.


Puede tener varias causas:
  • Un problema relacionado con la muscu latura del ojo: hay músculos que tiran más fuerte hacia un lado, y hacia ese lado se tuerce el ojo. Tiene repercusiones sobre la visión del pequeño, ya que el cerebro recibe dos imágenes diferentes de las cuales elimi na una, lo que puede originar ojo vago.
  • Puede ser provocado por un problema de visión (por ejemplo, una hipermetropía alta que hace torcer el ojo al chico para ver mejor) o, excepcionalmente, a una enfer medad que no tiene relación con la vista o los ojos, y en estos casos se convierte en un síntoma que nos ayuda a descubrir dicha enfermedad.
Cómo detectarlo: Los dos ojos no están alineados, y es posible que no se muevan a la par en la misma dirección (a veces o nunca). En los bebés puede haber un falso estrabismo: parece que el chiquito tuerce un ojo (por ejemplo, cuando mama), pero no es más que un efecto óptico debido a la forma del ojo o del puente de la nariz. El pediatra y el oftalmólogo son los responsables de diagnosticar correctamente un estrabismo.
Tratamiento: Cuando está asociado a mio pía o hipermetropía, los anteojos pueden ayudara corregir la desviación de los ojos, incluso totalmente en algunos casos. Otros niños necesitarán cirugía, que no se puede realizar con láser.

viernes, 23 de septiembre de 2011

PEQUES QUE SE TOCAN LOS GENITALES

LOS NIÑOS A ESTA EDAD SON MUY CURIOSOS Y EXPLORAN SU CUERPO.
Muchos niños pequeños se tocan los genitales o se los frotan. Tradicionalmente los tabués sexuales saltaban y a los niños se les culpabilizaba por su natural necesidad de exploración. Lo habitual era darles un manotazo o llamarles “guarros”, por no añadir algunas premoniciones de ceguera o terribles secuelas, aunque estas se reservaban a la masturbación expresamente.
Todavía, si los niños se tocan y más si lo hace una niña, se aconseja “distraerlos” para que dejen de hacerlo. En realidad, no es necesario, pero si es conveniente explicarles que las personas tocan esa parte de sus cuerpos en la intimidad y que es más adecuado hacerlo así, especialmente si hay personas en vuestro entorno a las que incomode intesamente. Aunque siempre podemos intentar explicarle a los adultos que es un comportamiento natural y que poco a poco los niños van entendiendo la privacidad precisa. Y pronto, al observarnos, entenderán que los adultos no nos tocamos los genitales en público.
Lo que desde luego no hay que hacer es transmitir a la niña verguenza o asco, ni culpa. Lo que hace no es malo, ni asqueroso. Quien así lo ve es el que tiene un problema.
Hoy somos más tolerantes y entendemos que el tocarse el cuerpo, para un niño pequeño, no es signo de ninguna obsesión malsana por el sexo, sino una expresión normal y natural de su necesidad de aprender y reconocerse. Sin duda existe placer en algunos casos, pero no está relacionado con las relaciones sexuales, sino con las sensaciones de un cuerpo sano.
A lo que si hay que estar atentos es a comportamientos compulsivos, continuos o expresamente sexuales, pues pueden ser signos de estados de ansiedad, problemas emocionales o de cuestiones más serias, como el abuso sexual. No me refiero a juegos o a tocamientos puramente físicos, sino a que estos sean permanentes y que vayan acompañados de conocimientos y actitudes explícitas no adecuadas para la edad del niño.
Pero si las cosas no son llamativas, a que se toque los genitales no hay que darle más importancia que si se rascan la cabeza o un pie.

LOS MIEDOS EN LOS PEQUES

Los niños pequeños ven terribles amenazas donde los adultos vemos cosas de lo más normales. Tengamos en cuenta que el miedo es un necesario y saludable mecanismo de los seres vivos para protegerse de estímulos desconocidos y potencialmente peligrosos. Y si encima esos fenómenos se acompañan de una estimulación intensa (ruido fuerte, colores estridentes, movimiento brusco, demasiada gesticulación...) es normal que el niño los perciba como amenazadores y reaccione con intensidad.
Cierta capacidad de miedo tiene una función positiva y protectora. Un niño debe tener miedo al tráfico de coches y al fuego, por citar dos temores útiles. Luego hay una serie de miedos más o menos fantásticos, que aparecen en todos los niños y que normalmente desaparecen al cabo del tiempo: miedo a ser devorado, a la oscuridad, a los personajes de ficción...

Hay que ser comprensivos

La actitud de los padres ante estos miedos infantiles es importante. No hay que regañarles por tenerlos, y no debemos burlarnos. Tampoco podemos confiar demasiado en que las explicaciones lógicas les tranquilicen, aunque no debamos renunciar a dárselas ("los monstruos no existen"). Así que debemos admitir que estos miedos son normales, permitirles expresarlos y ofrecerles nuestra atención y nuestro cariñoso apoyo.

Necesitan sentirse queridos

Al expresar sus miedos y recibir una respuesta cariñosa y tranquilizadora de sus padres, el niño cubre una necesidad básica, la de saber que no está indefenso ante los peligros, reales o imaginarios, y que puede encontrar abrigo frente a ellos. También hay que alentarle para superar el miedo, elogiándole por ello (¡qué valiente!). Hay que darle protección, pero también dejar que se aventure, en esta edad de intensa curiosidad y exploración.



Miedo a la oscuridad

En realidad es miedo a quedarse solo ante lo desconocido y sin el amparo de papá y mamá. Lo sufren la mayoría de los niños.
Es mejor no dejarles solos llorando en su habitación, desapareciendo hasta la mañana siguiente con la idea de que ya se les pasará, porque con ello confirmamos su temor al abandono. Y en vez de acostumbrarles a la oscuridad, lo que estaremos provocando es que le tengan más miedo. No conviene que los llevemos a nuestra cama ni que nos quedemos con ellos toda la noche. Lo que sí podemos hacer es volver a su cuarto de vez en cuando para que comprueben que seguimos ahí, pero tratando de ampliar progresivamente los ratos que son capaces de permanecer solos antes de dormirse. La puerta abierta, una luz en el pasillo o un peluche que les acompañe también serán de ayuda.

A los extraños

Ante personas desconocidas o a las que ha tratado muy poco, el niño reacciona aferrándose a papá o a mamá. No tiene nada de extraordinario y no hay que enfadarse por ello.
Hay que entender que si una persona se acerca repentinamente al niño y pretende tocarle o cogerle, este lo rechace. Incluso cuando llegan los tíos o los abuelos puede aparecer esta reacción. No hay que tomárselo a mal, sino respetar la distancia y el ritmo que el niño necesita. Lo que procede es un acercamiento progresivo, sin forzar la cosas y dando tiempo al tiempo.•

A personajes disfrazados

Se supone que los payasos son los amigos de los niños, pero a veces, a los más pequeños, maldita la gracia que les hacen.
Y es que sus maquillajes, sus movimientos, sus voces, sus ropajes y zapatones no siempre son bien digeridos por los chiquitines. En cuanto a sentarse en las rodillas de un Rey Mago, resulta demasiado fuerte para algunos niños. No les forcemos más allá de donde deseen, respetemos las distancias que necesiten y, si aun así lo pasan mal, dejemos circos y cabalgatas para uno o dos años más adelante.•

A los ruidos fuertes

Los electrodomésticos (la batidora, la aspiradora) pueden ponerles los pelos de punta.
También pueden temer a los cohetes o a los truenos. Pero es que a algunos también les asusta el teléfono, que suena a traición y en momentos inesperados. Hay que evitar en lo posible los sonidos fuertes, pero como no siempre es posible, podemos invitar a nuestro hijo a pasar juntos el aspirador, a conectar y desconectar su interruptor para que esa sensación de control le ayude a perder el miedo al ruido. Cuando haya tormenta empecemos por estar nosotros relajados y alegres, pongámonos juntos al lado de la ventana para contar los truenos y los relámpagos...


A esta edad los niños se dan cuenta de que algunos animales son amenazadores, aunque no saben distinguir cuáles.
Los que no sean especialmente miedosos ni hayan tenido experiencias negativas, perderán su miedo sobre los cinco o seis años. Mientras tanto, podemos permitir que el niño observe a los animales a distancia si no desea su proximidad, sin forzarle a ella. Pero es bueno que vea cómo otros adultos y niños interactúan con perros y gatos. Si aceptan acercarse en nuestra compañía al animal, perfecto; en caso contrario, no les forcemos.


No debemos utilizar sus miedos para controlarles: "Como no te portes bien te dejo solo". Tampoco debemos recurrir a personajes fantásticos o terroríficos para lograr la obediencia del niño, ya que su rica fantasía confunde ficción y realidad. El "coco", la bruja y similares prenden con gran facilidad en la mente de los niños, incluso sin que el adulto lo pretenda. Si les decimos que si no se duermen vendrá el coco y les comerá, realmente lo creerán... y no podrán dormir del temor. Querer controlarles con ese fácil recurso es una práctica insana que puede crearles verdaderos terrores desbordados e incontrolables.

jueves, 22 de septiembre de 2011

VIOLACIÓNES EN NIÑOS


Tan sólo en lo que va del presente año, la Procuraduría General de Justicia del estado (PGJ), ha iniciado aproximadamente 75 denuncias por abuso sexual, de las cuales un promedio de 46 han sido por violación consumada al existir algún tipo de penetración a la víctima. De estos números, obtenidos de manera extraoficial ante la reiterada negativa de la autoridad para dar a conocer sus cifras, un 74 por ciento de las denuncia hechas, es decir en 34 casos,  los afectados son menores cuyas edades rondan entre los 8 y 14 años. El resto de las víctimas se encuentran entre el rango de los 16 y 35 años de edad, de acuerdo a los libros de gobierno del Centro de Atención a Menores Víctimas Incapaces (Camvi) de la PGJ y agencias del ministerio público.

De igual forma, se desprende de los estudios y denuncias de la Procuraduría estatal que las víctimas, en el caso de los menores de edad, la mayoría sus atacantes resultan ser un integrante de su misma familia en línea de parentesco directo ascendente o descendente, o en su defecto algún amigo  cercano al seno familiar.

En el Centro de Readaptación Social del Estado de Tabasco (Creset), actualmente se encuentran recluidas 254 personas por el delito de violación, de las cuales el 70 por ciento ya purgan una condena por su falta, mientras que el resto se encuentran en proceso ante una autoridad penal.

Las razones

Un violador, más allá de satisfacer su necesidad sexual, lo que busca es establecer un dominio ante su víctima, pues un alto porcentaje de los atacantes sexuales, vivieron un evento traumático similar al que se ejerce, así detalló el perfil de un delincuente sexual el psicólogo y catedrático de la UJAT, Manuel M. Reyes.

Estableció que en este rubro, son dos los tipos de violadores que existen; el  común y el que abusador. Este último se da más en el seno familiar, donde la mayor parte de las veces todo comienza con un manoseo o tocamiento, y puede terminar en violencia sexual. “Cuando existe la penetración sin el consentimiento de la otra persona o hay algún tipo de agresión, es cuando cae en la violación. El violador no tiene sentimientos, no tiene compasión cuando está ejecutando el acto y sólo busca establecer el dominio sobre su víctima”

Sin embargo, estableció que es muy difícil poder identificar un violador en potencia, ya que es una persona común y corriente, por lo que resulta difícil poder determinar el perfil exacto o poder diagnosticar o prevenir el ataque de un violador.

El violador tiene un problema obviamente en la estructura  de su personalidad pero precisamente como es a nivel de la personalidad, no se puede  asegurar o detectar contundentemente qué pasa con este tipo de sujetos, mismo que busca y escoge a su víctima en la cual puede establecer ese sometimiento.

García Reyes señaló en entrevista que en el campo de la sicopatología existen lo que se conoce como enfermedades neuróticas, el neurótico, se considera que la mayoría lo somos,  nos exaltamos, estallamos, nos enojamos, lloramos, pero después de un rato cae en la cuenta de recapacitación y perdón, porque el neurótico este en contacto con la realidad.

Pero por otro lado, se encuentra el psicótico, que es el otro extremo del  neurótico. El encarna lo que la gente conoce como “loco”. La locura es esa persona que pierde el contacto con la realidad que no se da cuenta o no tiene conciencia de sus propios actos entra, entrando en lo que se conoce como delirio o  alucinaciones, que son alteraciones del pensamiento y de la mente o la percepción.

En estos perfiles se puede establecer a violador, que es un sujeto que tiene problemas en la esfera psicosexual, se puede hablar de inmadurez  lo cual lo lleva hacer muy impulsivo a tener poca tolerancia de la frustración y sobre todo a ejercer un dominio a la persona de que quiere violar o a la víctima.

Se dice que en la esfera analítica o sicodinámica están hablando de una persona insegura, inmadures, poca tolerancia a la frustración, ven algo y lo desean, no tienen esa espera y  sobre todo aquí hay un  aspecto muy importante que clasificar al sujeto  ya anterior ha tenido un evento traumático abuso o de cuestiones de agresión sexual.

Buscan dominio sobre su víctima

El también catedrático de la UJAT, explicó que en la sociedad en mucho de los casos existe una percepción errada, en cuando al violador, pues este más allá de buscar una satisfacción sexual, lo que ellos buscan en la violación es el dominio hacia la otra persona.

“Son personas inseguras, y hasta cierto punto tímidas, a través de ejercer esta agresividad, esa violencia buscan el poder y a esto se le llama compensación de mecanismos defensivos”.

En cuanto a la prevención, referente a la identificación de un violador, el psicólogo estableció que es difícil, se han hecho estudios del violador en potencia, se ha detectado que esas personas no tienen antecedente penales, que la gran mayoría no consume drogas, son personas bien colocadas, sea visto que hay persona que tienen  una vida normal, que tiene su esposa y al otro día cometen la violación.

Sin embargo también hay violadores sádicos que son los que tienden a los homicidios y se habla de un delincuente en potencia que es más grave y que puede entrar en personalidades sicopáticas o antisociales, llevándolo a un serial claro lleva a ser un sujeto patológico enfermizo.

DELITO GRAVE

Actualmente, la violación es considerada delito grave y en cualquiera de sus formas es castigada por la Ley;
Violación: (Pena: de 6 a 20 años)
Obligar física o psicológicamente a una persona a tener relaciones sexuales de cualquier tipo.
Tener relaciones sexuales de cualquier tipo con un menor de 12 años o discapacitado.
Introducir vaginal o analmente cualquier instrumento o parte del cuerpo distinta al miembro viril, por medio de la violencia.
Abuso Sexual: (Pena: de 1 a 5 años)
Obligar a una persona a cometer o someterse a algún acto erótico sexual.

Estupro: (Pena: de 6 meses a 5 años)
Tener relaciones con una adolescente mayor de 12 años y menor de 18 años.

Hostigamiento Sexual: (Pena: de 3 meses a 3 años)
Insinuar constantemente a una persona intenciones sexuales a pesar que ésta se niegue claramente al acto.
Pornografía Infantil: (Pena: de 6 a 21 años)
Facilitar, invitar o motivar a un menor de 18 años a realizar actos de exhibicionismo sexuales.
Fotografiar, grabar, imprimir, distribuir, comercializar cualquier representación sexual gráfica o audiovisual de un menor de 18 años.

SINTOMAS DE ABUSO EN NIÑOS:

Dolor, comezón o sangrado en partes genitales o ano.
Incomodidad al caminar o sentarse.
Cambio brusco en el estado de ánimo y confianza.
Pesadillas o alteración del sueño.
Orinarse en la cama.
Miedos repentinos a ciertas personas y lugares.

miércoles, 21 de septiembre de 2011

LOS PRE ADOLESCENTES

Lo has amado y cuidado desde el día en que lo trajiste a casa del hospital en donde nació. Te emocionaste mucho la primera vez que se sentó, sonreíste cuando aprendió a gatear y luego a caminar, y le aplaudiste cuando dijo sus primeras palabras. Los años en la escuela primaria se fueron volando y, de repente, ¡tu pequeño príncipe ó tu princesita está a punto de entrar ó ya está en la secundaria!
Y así te das cuenta que sus amigos han cambiado, su ropa ha cambiado y su actitud hacia ti también ha cambiado. Entonces te preguntas ¿Qué fue lo que pasó? … No mucho en realidad, simplemente “tu bebé” está creciendo.
Cambios, cambios y ¡más cambios!
Cuando los niños llegan a sus años de pre-adolescencia ó pubertad, hay una gran cantidad de cosas que les comienzan a suceder al mismo tiempo. No solamente se encuentran con un cuerpo completamente diferente al que tenían unos meses atrás, sino que también es el momento en el que descubren que viven en una sociedad en donde hay diferentes grupos de personas que son clasificados de acuerdo a su personalidad, en lugar de ser simplemente ser diferenciados por su edad. ¿Y ellos cómo van a definir su personalidad? A través de su medio ambiente.
Su independencia se convierte de repente en un factor muy importante en su vida. El ó ella empiezan a utilizar términos que tú quizás nunca hayas oído ó que tenían un significado completamente diferente cuando eras más joven. Tanto ha cambiado, que las madres muchas veces nos encontramos “perdidas” entre tanta novedad, y la primera reacción suele ser que confundamos estos cambios con rebeldía; y esto naturalmente crea fricciones entre los hijos y la madre.
El castigo y el niño pre-adolescente
Para los niños y niñas de entre los 10 y 13 años, la experiencia de encontrarse a sí mismos es una que involucra mucho ensayo y error. Como madre, nunca es bueno castigar a tu hijo por probar cosas nuevas. Puedes no estar de acuerdo con la nueva moda de tu hija ó los nuevos amigos de tu hijo, pero definitivamente no es tu trabajo el tomar esas decisiones por ellos. Si tu hijo cae en “mala compañía”, por ejemplo, cigarro ó alcohol, lo mejor que puedes hacer es hablar con él (con la mayor calma posible) y hacerle saber claramente las consecuencias de esas acciones.
Decirle a un pre-adolescente “no” ó castigarlo sin una explicación sólo empeorará las cosas. Cuanto más intentes detenerlo de vivir una experiencia, más posibilidades hay que haga todo lo posible por vivirla. Si mantienes la línea de comunicación abierta, te será mucho más fácil sobrellevar esta fase de la vida de tus hijos. Una cosa que siempre debes tener en cuenta es que los pre-adolescentes generalmente hacen lo que quieren para conseguir una reacción y hacerse notar. Si no hay reacción, entonces no tiene sentido para ellos hacer algo “indebido”.
Escucha sin juzgar
Los pre-adolescentes generalmente tienen dificultades para hablar con sus padres. No es “cool” hacerlo. Seguramente sus amigos saben más de lo que está pasando en la vida de tu hijo de lo que tú te has enterado. Pero simplemente recuerda: ¿Tus padres estaban enterados de lo que tú hacías durante esa etapa de tu vida? Viendo atrás seguramente te ríes de esos momentos, ya que a esa edad siempre hay maneras de ocultar las pruebas de lo que “traíamos entre manos”.
Por eso, nunca tomes su actitud como algo personal, y entonces tendrás una mejor posibilidad de que tu hijo te dé más información sobre su vida. Nunca lo presiones a hablar contigo, ya que eso hará que se distancie más. Cuando te diga algo, escucha sin juzgar. Por lo general no estará buscando una respuesta ó un consejo, simplemente quiere contarte una historia.
En pocas palabras: la experiencia es la mejor maestra en la vida. Haz lo posible para no obstaculizar las experiencias de tu hijo pre-adolescente y permítele tomar sus propias decisiones (dentro de lo razonable, por supuesto). El ó ella va a pasar por esta etapa mucho más fácil y felizmente pensando que es independientes y responsable de sus propios errores.
Para ti, como madre, también será más fácil ajustarte a esta etapa sabiendo que estás haciendo lo mejor para tu hijo. Y aunque el ó ella no te lo demuestre, seguro lo apreciará mucho más.
No olvides que está creciendo y eso es algo que no puedes cambiar. Así que lo mejor es aprender a amar el momento y disfrutar la experiencia.

lunes, 19 de septiembre de 2011

VESTIDOS ELEGANTES NIÑAS

Los vestidos elegantes para niña existen en una infinidad de modelos con los cuales nuestras pequeñas lucirán en toda fiesta y evento, ya que en ellas los vestidos lucen muy bien y se ven muy lindas.

Las nenas se verán muy bellas con los vestidos para niñas, sobre todo los rosas y azules que se ven espectaculares y dan un toque femenino a las nenas.

Podrás ver algunos modelos para que elijas el que mas te guste para tu pequeña niña.