ESTIMULACIÓN TEMPRANA

Los bebés  pueden desarrollar al máxinno su potencial intelectual  si reciben los estímulos adecuados a su edad. ¿Cuáles son los mejores ejercicios?

El bebé  de once y doce meses ha desplazado ra­dicalmente su centro de atención. En los primeros tiempos de vida su madre  y su propio cuerpo  eran lo más importante, tanto que no podía diferenciar una cosa de la otra.

Ahora sabe cuál es la diferen­cia entre lo extraño, lo nuevo y lo conocido. Y el mundo que lo rodea acapara toda su atención. La curiosidad de los bebés de esta  edad  es inagotable; sumada a una gradual autonomía en los movimien­tos se transforma en un recurso de estimulación muy útil.
DESARROLLO intelectual del bebe

- Percibe visualmente con ni¬tidez a unos 20 centímetros de distancia. - Prefiere observar los rostros humanos y reconoce las caras...

Como debe ser la estimulacion motriz de los bebes

Hasta los dos años, la mejor forma de estimular el desarrollo  de un bebé es a través del juego corporal. Precisamente, el especialista en educación  y psicología infantil Piaget, describió los primeros dos años de vida como la etapa “senso­rio-motriz”, según la cual los bebés aprenden nuevos conocimientos a través de los sentidos, el cuerpo y la actividad motriz.

Con el juego corporal se ejercitan tres funciones primordiales en la primera infancia:

- La motricidad gruesa, que abarca la musculatura abdominal  y de las extremidades, que se ejercita a través del gateo, la marcha y el equilibrio.

- La motricidad fina, que incluye la coordinación visual con la destreza manual.

- El desarrollo intelectual, mediante el cual el bebé comienza a resolver pequeños  problemas  y obstáculos que se le presentan.

Si un bebé recibe una correcta estimulación en todas estas áreas y además cariño y mucho amor, seguramente se están sentando las bases para un feliz desarrollo.

Ideas que ayudan a la estimulación:

- Hacerlo caminar por toda la casa, de la mano si aún no comenzó a ha­cerlo solo, pero sin forzarlo.

- Si tiene problemas de equilibrio ejercitarlo en este aspecto.

- Se le pueden proporcionar ju­guetes o elementos que le permitan apoyarse para desplazarse y mejo­rar la marcha: carritos, una mesa pequeña, cajas livianas, una silla, son elementos que él puede arras­trar y que a la vez le sirven de apoyo

- Enseñarle a sentarse en un banquito. Mostrarle que primero debe mirar dónde apoyarse. Es común que al principio se caiga porque no sabe calcular dónde apoya la cola.