Hay dos razones por las cuales nuestros hijos son centro de los ataques de depredadores:
Se han educado rodeados de buenas personas, donde cada quien es justo lo que dice ser. Los niños y adolescentes no tienen recursos para identificar las trampas y engaños.
Están en un proceso de rebeldía, que es utilizado por la mayoría de estos “personajes” para atraerse la atención del menor.
Pasos preventivos
Se debe hablar alos hijos sobre internet sus bondades pero también sus riesgos. No hay que sentir temor a decir la verdad a los niños, el mundo tiene peligros y debemos aprender a lidiar con ellos. Es importantes explicarles por qué no se debe compartir información privada con extraños.
Instalar monitores digitales que rastrean los sitios web que visitan los niños. Estos programas permiten observar todo lo que hacen en Internet y con quién se comunican.
Establecer horarios con los hijos de modo que no gasten la mayor parte de su tiempo en Internet, lo que aumenta el riesgo de ser agredido.
Estar atentos a cualquier cambio que se produzca en los niños y no dejar de mostrarse siempre como adulto de confianza que puede ayudarlos en cualquier situación.
Tú eres el único que puede velar porque tu hijo esté a salvo de esos depredadores que inundan el universo de la red mundial. No los dejes solos a merced de lo desconocido.
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